- 14 galletas oreo.
- 100 gramos de queso crema (tipo Philadelphia.
- Aproximadamente 180 gramos de chocolate blanco (de cobertura o postres).
Se trituran las galletas enteras (crema incluida) con una batidora o robot. También se pueden machacar poniéndolas en una bolsa con cierre y se golpean hasta que queden pulverizadas.
Se reserva una cucharada sopera de las galletas pulverizadas para decorar las trufas.
Se mezcla el resto del polvo de galletas con el queso crema y se mezcla todo bien hasta que quede una masa compacta.
Se hacen bolas con la masa del tamaño que mas guste y se meten un ratito a la nevera hasta que cojan cuerpo y se endurezcan un poco.
Se derrite el chocolate en el microondas a intervalos de 20 segundos con cuidado de que no se queme, o al baño María, poniéndo una cazuela con un poquito de agua, y encima un bol sin que toque el agua, se pone el chocolate y poco a poco se irá derritiendo.
Cuando el chocolate esté derretido, se echan las trufas una a una en el bol y se cubren bien con el chocolate y se ponen a secar encima de un plato o una bandeja forrada con un papel de horno para que cuando endurezcan se puedan separar bien. Se espolvorea por encima el polvo de galleta que se había separado en un principio, se dejan reposar para que el chocolate endurezca y listas.
Se reserva una cucharada sopera de las galletas pulverizadas para decorar las trufas.
Se mezcla el resto del polvo de galletas con el queso crema y se mezcla todo bien hasta que quede una masa compacta.
Se hacen bolas con la masa del tamaño que mas guste y se meten un ratito a la nevera hasta que cojan cuerpo y se endurezcan un poco.
Se derrite el chocolate en el microondas a intervalos de 20 segundos con cuidado de que no se queme, o al baño María, poniéndo una cazuela con un poquito de agua, y encima un bol sin que toque el agua, se pone el chocolate y poco a poco se irá derritiendo.
Cuando el chocolate esté derretido, se echan las trufas una a una en el bol y se cubren bien con el chocolate y se ponen a secar encima de un plato o una bandeja forrada con un papel de horno para que cuando endurezcan se puedan separar bien. Se espolvorea por encima el polvo de galleta que se había separado en un principio, se dejan reposar para que el chocolate endurezca y listas.
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